El sistema genitorinario son los órganos urinarios y genitales en ambos sexos. Generalmente las mujeres tienen mayor predisposición a padecer enfermedades de este sistema. 50% las padecerán al menos una vez en su vida, y el 30% tiene cistitis al menos 1 vez al año.
En hombres estas enfermedades son más frecuente antes del año de vida y después de los 50. La mayor susceptibilidad femenina se debe: 1. una uretra más corta y cerca del piso pélvico, lo que facilita la contaminación bacteriana 2. los cambios hormonales periódicos y del embarazo que favorecen el crecimiento bacteriano. 60% de las infecciones en el embarazo se transformaran en graves por falta de tratamiento. En general el 95% de las infecciones genitorurinarias son bacterianas, con Escherichia coli en un 70-80% de los casos, S. Saprophyticus en un 5-15% de los casos de mujeres entre 15 a 25 años, el resto de las infecciones se producen por Proteus mirabilis o Klebsiella pneumonae, entre otras (Soc. Esp. Nef, 2017, CIC, 2017).
La salud de este sistema depende del buen funcionamiento de los riñones y de las hormonas, que son sustancias que regulan el desarrollo, aportan energía, regulan el ritmo cardiaco y los ciclos de fertilidad e incluso los niveles de sodio y glucosa. Son producidas por las glándulas endocrinas: Gónadas sexuales (testículos y ovarios), glándulas adrenales, páncreas, timo, tiroides y paratiroides y glándulas superiores